Los Guardianes del Día
Ayer fue un día muy improductivo en mi vida. Cero aporte. Uno de esos que uno desearía dejar guardado para cuando lo necesitara... como acumular días de vacaciones en el trabajo.
Lástima que no se puede, pero de todas maneras voy a darle una carta de sugerencia a dios para que considere tomar mi propuesta.
Ya me imagino un dialogo con Jebús:
- Hola Jebús ¿qué te trae estos lados?
- Nada loquilla, solo pasaba por aquí para saludar
- Sabes que hoy, ayer, anteayer me levanté y quede desocupada... esto de ser cesante, me alcanza hasta para escribir en blogs que nadie lee... pero oye te tengo una propuesta, cuando encuentre pega y esté estresada y no tenga tiempo ni pa` sacarme los loros ¿me podrías devolver mis horas acumuladas? Y así me voy a dar una vuelta a misa.
- ¿Y por qué no vas ahora?
- Estoy ocupada viendo películas fomes.
Esperando la respuesta a mi propuesta tan genial, solo me queda comentar una película muy, pero muy fome, que afomó más mi día de fomedad.
“Los guardianes del día”(Nochnoy Dozor), film ruso estrenado en el 2006. Recuerdo, como si fuera ayer, cuando salió la periodista del trece con su resumen de películas de la semana y apareció esta joyita. Quede omnibulada con el trailer y dije:
- Yaaaaaaa estos rusos se pasaron. Hay que puro verla.
Y como todas las películas que hay que puro verlas, no la fui a ver porque dejé pasar los días y la sacaron de la cartelera.
Aún después de tanto tiempo seguía intrigada con la historia de los caballeros de la luz contra los de la oscuridad (a lo más caballeros del zodiaco) y con vampiros y batallas con soldados y buenos efectos especiales, y... Y na’!
Lo único bueno fue el principio, donde hablaban sobre un pacto en la edad media entre la luz y la oscuridad, etc. Ahí compré la pomada para seguir viendo como las cinco horas de películas restantes, después la cuestión se puso más enredada que pelo de rasta y no caché ni una cosa (y eso que me considero una experta en identificar tramas), pero no es culpa mía que el asunto estuviera tan mal contado, o quizás no entiendo la dinámica Rusa. En todo caso es la segunda parte de otra entrega cinematográfica. A lo mejor ahí está respuesta a todas mis interrogantes. No lo sé.
No me queda nada más que recomendar que no pierda horas de su vida en verla, porque es probable que Jebús no acepte mi propuesta y su tiempo no lo pueda recuperar.
En resumen, como veinte horas perdidas de mi vida, porque la cuestión fue eterna y me dolía el trasero de estar tanto rato sentada (después tuve que aplicar la técnica del lápiz).
Pa` películas, que los rusos se dediquen a tomar vodka. Ojalá la guarden en una bóveda hasta la segunda venida.
Ayer fue un día muy improductivo en mi vida. Cero aporte. Uno de esos que uno desearía dejar guardado para cuando lo necesitara... como acumular días de vacaciones en el trabajo.
Lástima que no se puede, pero de todas maneras voy a darle una carta de sugerencia a dios para que considere tomar mi propuesta.
Ya me imagino un dialogo con Jebús:
- Hola Jebús ¿qué te trae estos lados?
- Nada loquilla, solo pasaba por aquí para saludar
- Sabes que hoy, ayer, anteayer me levanté y quede desocupada... esto de ser cesante, me alcanza hasta para escribir en blogs que nadie lee... pero oye te tengo una propuesta, cuando encuentre pega y esté estresada y no tenga tiempo ni pa` sacarme los loros ¿me podrías devolver mis horas acumuladas? Y así me voy a dar una vuelta a misa.
- ¿Y por qué no vas ahora?
- Estoy ocupada viendo películas fomes.
Esperando la respuesta a mi propuesta tan genial, solo me queda comentar una película muy, pero muy fome, que afomó más mi día de fomedad.
“Los guardianes del día”(Nochnoy Dozor), film ruso estrenado en el 2006. Recuerdo, como si fuera ayer, cuando salió la periodista del trece con su resumen de películas de la semana y apareció esta joyita. Quede omnibulada con el trailer y dije:
- Yaaaaaaa estos rusos se pasaron. Hay que puro verla.
Y como todas las películas que hay que puro verlas, no la fui a ver porque dejé pasar los días y la sacaron de la cartelera.
Aún después de tanto tiempo seguía intrigada con la historia de los caballeros de la luz contra los de la oscuridad (a lo más caballeros del zodiaco) y con vampiros y batallas con soldados y buenos efectos especiales, y... Y na’!
Lo único bueno fue el principio, donde hablaban sobre un pacto en la edad media entre la luz y la oscuridad, etc. Ahí compré la pomada para seguir viendo como las cinco horas de películas restantes, después la cuestión se puso más enredada que pelo de rasta y no caché ni una cosa (y eso que me considero una experta en identificar tramas), pero no es culpa mía que el asunto estuviera tan mal contado, o quizás no entiendo la dinámica Rusa. En todo caso es la segunda parte de otra entrega cinematográfica. A lo mejor ahí está respuesta a todas mis interrogantes. No lo sé.
No me queda nada más que recomendar que no pierda horas de su vida en verla, porque es probable que Jebús no acepte mi propuesta y su tiempo no lo pueda recuperar.
En resumen, como veinte horas perdidas de mi vida, porque la cuestión fue eterna y me dolía el trasero de estar tanto rato sentada (después tuve que aplicar la técnica del lápiz).
Pa` películas, que los rusos se dediquen a tomar vodka. Ojalá la guarden en una bóveda hasta la segunda venida.
Título: Guardianes del día
Título original: Nochnoy Dozor
País: Rusia
Director: Timur Bekmambetov
Reparto: Konstantin Khabensky, Aleksei Chadov, Yuri Kutsenko, Igor Lifanov, Sergei Lukyanenko, Rimma Markova, Vladimir Menshov, Nikolai Olyalin, Mariya Poroshina, Galina Tyunina, Viktor Verzhbitsky, Valeri Zolotukhin